El negocio online no es fácil, es complejo. Esto significa que muchos pequeños se tienen que cuestionar si se tienen que introducir en el mundo online. Si el pequeño comercio no es rentable, muere. Las grandes compañías en algunos momentos se pueden permitir el lujo de tener pérdidas porque son los que pueden recuperar. Tristemente si el pequeño comercio tiene un mal año, muere. Y el negocio online es muy complejo y poco rentable a corto plazo. Al pequeño comercio lo que más le asfixia en su cuenta de explotación es el alquiler del local y luego, obviamente, los costes de personal. Cuando hay negocio online se tienen que aumentar los costes de personal porque alguien se tiene que ocupar de ello. Cosa que el pequeño comercio no puede hacer y acaba asumiendo el trabajo el personal que ya tiene, pero no puede dedicarse a ambos. En ocasiones se introducen en el mundo online de una manera incoherente y se acaban asfixiando.